Sermon

Los rostros de la Pascua

Theme

La alegría de la Pascua

Object

5 palitos de manualidades; papel; bolígrafo; cinta adhesiva

Scripture

Lucas 24:1-12

Recorte cinco círculos y dibuje las siguientes caras en uno de ellos: feliz, triste, sorprendido, enfadado y asustado. Pegue un círculo en la parte superior de los palitos de manualidades.

La Pascua es un día muy alegre, ¿cierto? (Haga una pausa para escuchar las respuestas). Es el día en que celebramos la resurrección de Jesús. Me parece interesante pensar en lo que los amigos de Jesús podrían haber sentido ese día.

Todos sabemos que nuestros rostros muestran lo que sentimos. A veces tratamos de ocultarlo, pero no siempre somos tan buenos para esconder lo que sentimos. Hoy, no quiero que lo oculten. Mientras cuento la historia, quiero que usen sus rostros para mostrar cómo se sienten las personas de la historia con respecto a lo que está sucediendo. (Invite a cinco niños a ponerse delante de la clase y haga que cada uno de ellos sostenga uno de los carteles. Levantarán los carteles cuando piensen que la emoción está presente. Explique que puede haber más de una emoción presente. Los niños del público usaran sus rostros para mostrar la emoción que podrían sentir. Si quieren mostrar más de una emoción, pueden alternar sus emociones repetidamente).  

En una mañana, muy temprano, del primer día de la semana, algunas mujeres fueron a visitar la tumba donde su amigo, Jesús, había sido enterrado. Había sido crucificado y había muerto en una cruz. (Este puede ser un momento en el que los niños muestren caras tristes. Recuérdele a los niños usar los carteles y sus rostros. Preste atención a cualquier respuesta singular para poder hacer una pausa rápida y dejar que el niño lo explique brevemente). 

Fue enterrado en una tumba prestada y las mujeres iban a poner especias sobre su cuerpo. (Haga una pausa).

Cuando llegaron a la tumba, las mujeres descubrieron que la piedra que había cubierto la entrada había sido removida. (Haga una pausa).

Cuando miraron dentro de la tumba, se llevaron la mayor sorpresa de todas. ¡La tumba estaba vacía! Pensaron que alguien había robado el cuerpo de Jesús. (Haga una pausa).  

De repente, dos hombres con ropas brillantes se acercaron y se colocaron al lado de las mujeres. Asustadas, se inclinaron con el rostro hacia el suelo. (Haga una pausa). 

Los hombres se dirigieron a las mujeres y les dijeron: "¡Jesús no está aquí; ha resucitado! ¿No recuerdan lo que les dijo cuando estuvo en Galilea?" (Haga una pausa).

Cuando las mujeres recordaron lo que Jesús les había dicho, dejaron de tener miedo. Su miedo se convirtió en alegría. Entonces, volvieron para contarle a los discípulos de Jesús lo que habían visto y que Jesús había resucitado, tal como les había dicho que lo haría. ¡Ese fue el día más feliz de todos! (Invite a los niños a mostrar su cara de felicidad levantando el cartel).

Tú y yo tenemos motivos para estar alegres hoy. Estamos felices porque sabemos que Jesús resucitó de la tumba y que vivirá para siempre. Pero también somos felices porque sabemos que la Biblia nos dice que "quien crea en Él no perecerá, sino que tendrá vida eterna". Esa sí que es una razón para estar alegres, ¿no es así?  (Invite a los niños a mostrar su cara de felicidad levantando el cartel).

Amado Padre, hoy estamos muy alegres porque Jesús resucitó de la tumba y vivirá para siempre. También nos alegramos porque sabemos que los que creen en Él también tendrán vida eterna. En el nombre de Jesús, amén.